Bueno... para esta semana tenía otra entrada preparada, pero es que me ha gustado tanto este bizcocho decorado que no he podido resistirme a cederle a la delantera y enseñarlo cuanto antes ;)

Es taaaan fácil, taaan rico y taaaan bonito que no encuentro ni un sólo motivo para que no os pongáis ahora mismo a prepararlo!! jeje! La pirmera vez que lo vi fue en el blog de la "Receta de la felicidad" y la verdad es que a primera vista me pareció que debía ser algo muy complicado... luego investigando un poquito más encontré la propuesta de "kanela y limón" (que últimamente me tiene enganchada... todo hay que decirlo!) y me pareció igual de bonita y aún más sencilla, ya que la propuesta es utilizar la propia masa del bizcocho del brazo de gitano tintada con el color que más nos guste.

La receta original era con más cantidad, pero mi horno es pequeño y mi bandeja también, así que tuve que reajustar cantidades. Y ahí va la receta:

Una parte muy importante de este trabajo es preparar el dibujo que queremos que adorne nuestro bizcocho. Yo elegí para probar un patrón de ramitas muy sencillo que complementé con algunos puntitos individuales. Imprime tu dibujo o hazlo sobre un papel, vamos, o si eres todo un artista a dibujar del tirón sobre el papel de horno! Para los que el dibujo no está entre nuestras virtudes, ponemos el papel impreso bajo el papel de horno que vayamos a utilizar.

Comenzamos a preparar la masa: mezclamos 15g de azúcar con la leche y el aceite, moviendo bien hasta que se integre todo. Ponemos a continuación la harina y las yemas de huevo y volvemos a remover. En un bol a parte montamos las claras a punto de nieve, añadimos la pizca de sal y el azúcar en forma de lluvia, hasta que se forme una especie de merengue ligero y brillante. Añadimos las claras ya montadas al resto de la masa envolviendo cuidadosamente para que no se bajen. 

Con toda la masa lista, retiramos un par de cucharadas a un bol más pequeño y añadimos el colorante del color que vayamos a utilizar, en mi caso elegí el rojo, porque siempre queda muy vistoso, además, iba bien con las fresas que tenía para el relleno. Ponemos la mezcla ya coloreada en una manga con una boquilla muy fina. Si no tenéis mangas, podéis fabricar una con papel de horno o con una bolsita cortándole un piquito.

Vamos poco a poco dibujando con la manga y la masa sobre el papel de horno el patrón que hemos colocado debajo, como calcándolo, hasta cubrir toda la superficie que ocupe nuestra bandeja. Una vez hecho el dibujo, lo ponemos en el horno precalentado a unos 160º durante un minuto, ya que empezará a cocerse muy pronto. Sacamos la bandeja del horno y ponemos el resto de la masa sobre nuestro dibujo. Volvemos a meterlo en el horno y lo dejamos unos 15 minutos. Cuando esté listo lo retiramos y lo volcamos sobre otro papel. Con cuidado retiramos el papel en el que habíamos hecho el dibujo, y hacedlo con cuidado porque puede pegarse un poquito, no tengáis prisa. Luego enrollamos el bizcocho sobre sí mismo, dejándo evidentemente el lado del dibujo hacia fuera. Lo dejamos enfriar completamente, no tarda mucho...

Mientras vamos preparando el relleno: ponemos los 200ml de nata y batimos con la barilla eléctrica (si sois capaces de hacerlo manualmente os admiro!!) hasta que se ponga cremosa, entonces añadimos poco a poco el azúcar hasta que esté montada. Cortamos las fresas en cuadraditos y mezclamos con la nata: ojo con no comerse las fresas con nata antes de rellenar!! 

Cuando el bizcocho esté totalmente frío lo abrimos y ponemos la nata con las fresas dentro. Deja un espacio en el lado de cierre sin cubrir para que no te reboce al cerrarlo. Vuelve a enrollarlo y ponlo una media hora más en el frío para que coja más consistencia el relleno. 

Luego el resultado será algo parecido a esto y te puedo asegurar que querrás repetir una y otra vez, y te obsesionarás con buscar nuevos dibujos!!! (o eso soy sólo yo???)