Dificultad: media
Tiempo preparación: 45 minutos


Ingredientes
- 1 pescada
- 1 bote de banderitas picantes o dulces
- 1 lata de atún
- Mahonesa
- Lechuga

Lo más importante de esta receta es preparar adecuadamente la pescada. Si lo pides, seguramente en la pescadería te la dejen ya limpia y abierta por la mitad, que es justo como la necesitamos. Aunque no es fundamental, si dejamos la cabeza la presentación queda más bonita.


Saca las banderitas del palillo y trocea todas las piezas en pequeños cuadritos. Ponlos en un bol y mézcla también el atún escurrido y desmigado. Coloca esta mezcla en el centro de tu pescada abierta, y una vez bien repartida ciérrala y apriétala bien para que quede todo dentro.



Pon la pescada ya cerrada sobre un paño limpio, con el que debes envolverla y amarrarla con una cuerdecita (como los rellenos) para que quede bien sellada de cara a la cocción.



Prepara una olla en la que quepa la pescada entera, con agua hirviendo, un chorrito de aceite de oliva y un poco de sal. Cuando esté hirviendo, introduce la pescada envuelta en el paño y déjala cocer unos 10 minutos. Una vez transcurrido ese tiempo, sácala de la olla y déjala enfriar un poco sobre un escurridor.



Cuando baje un poco la temperatura que ya puedas manejarla, abre el paño y ve retirando con cuidado la piel de la pescada, que tras la cocción se desprenderá fácilmente.

Déjala enfriar un poco más, y mientras tanto corta la lechuga muy fina y alíñala sobre un escurridor para que coja un poco de aliño, pero no acumule líquido en la bandeja de presentación.

Coloca la pescada sobre una bandeja y cubre los laterales con la ensalada ya aliñada. Una vez que esté todo colocado, cubre la pescada con mahonesa hasta que quede completamente blanca.

Si la mahonesa es casera para mi gusto es mucho más rica. También puedes utilizar cualquier otra salsa suave que te guste, con algún toque de salsa rosa suave creo que debe estar también muy apropiada.