Esta entrada será breve, pero no podía dejar pasar la oportunidad de enseñaros un tesorito que ha aterrizado por casualidad en mi cocina. Se trata de azúcar perlado importado directamente desde la cuna del gofre, desde Bélgica ;) Y lo llamo tesoro, porque desde luego es muy complicado encontrarlo por estas tierras.

Hace unas semanas trataba de explicarle a un amigo de qué se trataba eso del azúcar perlado, esas piedrecitas de azúcar tan características de los auténticos gofres belgas. Y él me decía que no tenía ni idea de qué le estaba hablando, que nunca había visto ese tipo de azúcar. A partir de ahí he preguntado a varias personas y el resultado ha sido el mismo... 

Así que ahora que el destino lo ha traido hasta mi, me ha parecido que debía compartirlo para que todos aquellos que no la conocéis podáis verla. Hoy la he probado con un bizcocho de huevo (que también os enseñaré pronto), a ver cómo resulta.

Con los gofres por ahora no sé si me atreveré (sobre todo porque no tengo gofrera ni quiero más cacharros en mi cocina, por favor!!!), pero para poneros los dientes largos os dejo esta foto de uno que sí disfruté en mi visita a ese dulce país.